Una de las posibilidades, al elegir un reloj de cuco moderno, es la de que sea musical. Normalmente esta característica va asociada a la existencia de una plataforma giratoria con autómatas en la parte superior de la esfera del reloj, que giran al compás de la música. Esta se produce mediante un mecanismo que es accionado por una palanca de la sonería del reloj. En la imagen anterior podemos ver cómo es uno de estos dispositivos musicales. En el podemos apreciar un cilindro con púas, que al girar, desplaza el extremo de unas láminas de acero que producen cada una de ellas una determinada nota. Las notas, producidas en una determinada secuencia, crean la melodía que escuchamos. En esencia, este tipo de mecanismos son básicamente como los que podemos encontrar en una caja de música.
En las imágenes anteriores vemos el mecanismo musical desmontado. No es un mecanismo excesivamente complejo, pero para que funcione correctamente, debe estar perfectamente ajustado en el reloj. Desde el punto de vista del funcionamiento de este mecanismo, podemos decir que adopta 3 estados diferentes: 1) parada 2) en preparación y 3) girando el cilindro de púas y sonando la música.
Al igual que ocurre en el mecanismo de sonería de cualquier reloj, el mecanismo musical tiene que tener un sistema de estabilización que regule la velocidad de giro – en este caso – del cilindro de púas. Esto hace que la velocidad angular a la que gira el cilindro sea constante, y por tanto, uniforme la velocidad a la que se reproduce la melodía.
El cilindro de púas tiene incorporado en uno de sus extremos una rueda dentada que gira solidariamente con el. Mediante esa rueda dentada se le hace girar. Esa rueda es accionada por otra intermedia, que a su vez recibe la fuerza motriz de una tercera mediante una pesa. En otras ocasiones la pesa cuelga de una cadena que engrana en un rodete unido a esta primera rueda dentada.
Uno de los «talones de Aquiles» de estos mecanismos musicales es la pequeña rueda dentada del «gobernor» que engrana con el sinfín del venterol. A veces es de plástico, y con el tiempo se produce en ella una grieta radial. Esto hace que la separación de los dientes a ambos lados de ella, sea mayor de la debida, lo cual imposibilita en engrane. El «gobernor» queda bloqueado, y el mecanismo musical no funciona. En relojes de mayor calidad esa pieza es metálica, y este tipo de grieta no se produce.
Otro punto importante – como se ha indicado más arriba – es el ajuste del mecanismo para que funcione correctamente. En el estado que hemos llamado «en preparación», hay un alambre que debe tocar las aspas del venterol para evitar que gire. Una vez terminada la sonería del canto del cuco, ese alambre debe desplazarse hacia arriba, y liberar al venterol, que de esta forma empezará a girar y sonará la melodía. Pues bien, ese alambre a veces se deforma y no hace correctamente su función. Para evitar esto, los fabricantes utilizan para esa pieza alambre acerado, y así se deforma más difícilmente. Pero…cualquier persona con experiencia en la reparación de este tipo de relojes, sabe que la calidad de estos alambres y restantes piezas varía de unos a otros.
