Embalaje y empaquetado de relojes

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¿Es necesario transportar el reloj?

Lo ideal es no transportar los relojes. Todo transporte, por cuidadoso que sea, implica riesgos, y por eso, antes de decidir transportar un reloj, es importante preguntarse si es absolutamente necesario.

Obviamente, cuanto más valioso sea el reloj, más conveniente será no transportarlo.

¿Puedo llevar el reloj personalmente?

Si el transporte es inevitable, pasamos a una segunda pregunta: ¿Puedo llevarlo a su destino personalmente?. Esto suele ser más seguro que entregárselo a una agencia de transporte. Una persona llevando el reloj con ella, sabiendo como debe empaquetarlo o embalarlo, es una solución bastante acertada para evitar que se produzcan daños al reloj.

Si ello no fuera posible, y ha de entregarse el reloj a una agencia de transporte, es absolutamente vital empaquetarlo o embalarlo profesionalmente, cuidando hasta los más mínimos detalles. Un error durante esta etapa en la que se prepara el reloj para el envío, puede resultar fatal. Por eso, si no se tiene suficiente experiencia, lo más prudente es consultar a alguien que la tenga.

¿Cómo empaquetar o embalar el reloj?

Es arriesgado  dar unas reglas fijas porque cada caso será distinto. Tómense estas recomendaciones como generalidades que solo tratan de dar una orientación sobre la forma de proceder.

¿De que tipo de reloj se trata?

No es lo mismo preparar un reloj inglés de caja alta o antesala que un pequeño reloj de cuco, por ejemplo. El tamaño (y consiguientemente el peso), es muy importante. Para un reloj pequeño, una caja de cartón con buena rigidez, unas placas de polietileno rígido en las paredes interiores, y una generosa envoltura del reloj con plástico de burbujas, normalmente es suficiente para que el reloj llegue perfectamente a su destino. En el caso de un reloj de gran tamaño, como puede ser un reloj de antesala, una caja de madera, con fijación del reloj a ella mediante cintas, y protección de todas las partes del reloj en las que se fijen, es lo básico. El relleno de la caja de embalaje también es conveniente.  Pero, hay tantos aspectos que habría que analizar en este tema, que vayamos de uno en uno.

¿De que tamaño es el reloj?

A mayor tamaño más importante es la rigidez de la caja o embalaje del reloj. Esa será la primera capa de protección del  reloj. La primera barrera defensiva.

¿Caja de madera o de cartón?

En un reloj de tamaño mediano o grande: caja de madera hecha a la medida del reloj. Si el reloj es pequeño, puede utilizarse una caja de cartón rígido. Lógicamente podría matizar esto. En el caso de un reloj pequeño, de gran valor, puede utilizarse una caja de madera hecha a la medida.

¿Caja de cartón simple o doble caja?

La fórmula de la doble caja de cartón es buena, cuando el tamaño del paquete no es muy grande. En un reloj de tamaño medio, como podría ser uno de “ojo de buey”, por ejemplo, la doble caja de catón no le protegerá del desastre si durante el transporte colocan mucho peso sobre ella.

¿Utilizo placas de polietileno?

Definitivamente si. Personalmente prefiero el polietileno extruido frente al expandido. Tiene mayor rigidez y no suelta las típicas bolitas que se adhieren a cualquier cosa. Ambos sirven, pero las placas de polietineno extruido cortadas a la medida para reforzar todas las superficies internas de la caja es la mejor opción.

¿Debe rellenarse la caja?

Si. El reloj envuelto en plástico de burbujas, no debe tener la posibilidad de moverse dentro de la caja. Por esa razón debe rellenarse con un material que lo impida.

¿Que hacer si hay otros objetos dentro de la caja?

Los más típicos serían las pesas del reloj. Ya se comprende que deben fijarse de alguna forma segura. Unas pesas dentro de la caja, con posibilidad de moverse e impactar sobre el reloj posiblemente lo dañarían. Las pesas deberán estar envueltas en plástico de burbujas, pero aún así, no deben tener la posibilidad de moverse en el interior de la caja.

¿Como poner cintas adhesivas?

Si se utiliza cinta adhesiva nunca debe aplicarse directamente sobre el reloj. La cinta adhesiva sobre el reloj, al ser retirada, arrancará el barniz de la madera y dejará una marca horrorosa. Es llamativo que algunas personas comentan este error al proceder al empaquetado.

¿Debe sacarse el mecanismo de la caja?

Esta es una pregunta difícil de responder. En relojes en los que el mecanismo es muy pesado, puede ser interesante sacarlo de la caja antes de empaquetarlo. De esta forma tendremos el mecanismo envuelto en plástico de burbujas, y por otro lado la caja del reloj también envuelta con el mismo material. Pero, evidentemente, no todas las personas están capacitadas para sacar de su caja el mecanismo de un reloj, y por tanto, recomendar esto de forma general, no sería correcto. Como idea básica, diría que en el caso de que el que empaquete el reloj tenga experiencia y habilidad al manipularlo, podría sacar el mecanismo de la caja. Un ejemplo típico sería en de un bracket inglés. Estos relojes tienen mecanismos muy pesados, y el envío por separado, caja y mecanismo, suele ser lo mejor para evitar daños.

¿Debo rellenar el interior de la caja del reloj?

Es conveniente. Si el mecanismo es pesado y por la razón que sea, se envía dentro de la caja, es muy conveniente rellenar todos los huecos con plástico de burbujas. En relojes con mecanismos ligeros esto no es tan necesario.

¿Que partes del reloj son más delicadas?

Hay varias. Si el reloj tiene tallas de madera, por ejemplo, es vital protegerlas, asegurándonos de que no van a existir fuerzas sobre ellas. Otros materiales delicados son el vidrio y el cristal. Duros, pero muy frágiles, pueden romperse si reciben un golpe. Hay vidrios soplados antiguos, con preciosas burbujas en su interior, que son vestigios de una forma de fabricación artesanal, cuya rotura debe evitarse a toda costa. Lo mismo cabe decir de los cristales, a veces tallados, que encontramos en algunos relojes.

Otro punto delicado es el de los cañones horarios. Estos sobresalen del dial, y debe disponerse todo dentro de la caja, de modo que no sufran el más mínimo esfuerzo. Una fuerza, un golpe sobre el eje de los cañones horarios, podría producir su deformación o rotura.

¿Debe descolgarse el péndulo del reloj?

Obviamente, si. El péndulo va colgado habitualmente de una pieza flexible que le permite oscilar. Esa pieza, a la que llamamos suspensión, puede romperse  si el péndulo está colgado en ella durante el proceso de transporte. Además, el péndulo iría golpeando al mecanismo o a la caja, si no se retirase. En algunos relojes, existe la posibilidad de fijación del péndulo sin necesidad de retirarlo, pero no es lo habitual.

¿Debe contratarse un seguro de envío?

Esta es una opción. Las agencias de transporte suelen tener modalidades de envío con seguro, por una cantidad adicional. Incluso hay trabajadores de estas agencias que lo sugieren, al considerar que los paquetes con seguro son tratados mejor.

¿Etiqueta de aviso de contenido FRÁGIL en el exterior de la caja?

Es recomendable. No garantiza nada, pero al menos informa a las personas que manipulen el paquete, de que hay algo muy delicado en su interior que puede romperse.

¿Porqué es necesario transportar los relojes?

Una de las razones de esto tiene que ver con los tiempos en los que vivimos, en los que muchas veces se realizan compras a distancia. Alguien compra un reloj que está a miles de kilómetros, y siendo habitual que no pueda ir a recogerlo en persona, la única solución para tenerlo es el envío por agencia de transporte. En estos casos, la habilidad y experiencia del vendedor, en lo relativo al empaquetado y embalaje de relojes, será crucial para que la operación culmine con éxito.

Ejemplos de empaquetado

Empaquetado de un reloj de cuco

Embalaje de un reloj comtoise

Envío del reloj en cajas de madera hechas a la medida.